LOS JUECES
Cómo es que dicen
conocerte, saber cómo eres, cómo estás, cómo piensas, cómo sientes (?) Te
clasifican, te ponen en un anaquel, con la etiqueta con la que te identifican y
ahí quedas cristalizado, por la subjetiva opinión de uno de los jueces que abundan, todo alrededor.
Te
analizaron someramente, te compararon con el modelo perfecto que tienen como
entelequia y saliste perdiendo, te falta mucho, casi todo para asemejarte a tal
paradigma.
Quedaste no
solo reprobado, sino además descalificado y podría ser que hasta desterrado.
Deberías haber sido un ejemplo; pero cada vez que te quieren elevar al pedestal donde lo ideal se yergue, te
desplomas, para confundirte con el polvo.
Es inútil
que te levanten de tal caída, de nada serviría que te invitaran una vez más, fracasarán
en el intento y tú lo sabes; pero te obligan, te tienen encasillado.
¡Ah! Quieres
escapar por la ventana, salir sigiloso por atrás, porque tú no eres “ese”, ese
“así” petrificado, congelado en un eterno témpano, ese que quieren los jueces
que deberías ser; ese “así” es fijo, inamovible, una constante
que ni disfrazado podrías con ella. Te ven desde allá, de fuera de ti; tú estás
acá solo, dentro de ti, ves desde tu interior “en vivo” para afuera; los demás
te pueden ver, tú no, eres la única persona en el mundo incapaz de hacerlo.
Pero tú
sientes, tú percibes, actúas e
interactúas en consecuencia con la voluntad de los otros, de los demás, a veces de la greña, a veces de la mano.
El mismo
error tú cometes, sin querer eres también otro juez, porque clasificas,
comparas, juzgas, etiquetas y encasillas; los tienes como paquetes
generalizados. Aquí colocas unos, acá otros y allá a los demás. Las realidades cambiantes
no son ni observadas en su movimiento ni en su aceleración ni en su freno. Son
percibidas como paralizadas en el aparador, las has convertido en bizarro
maniquí y el hombre de carne y hueso ya corrió, ya se fue adelante, ya se quedó
o simplemente tomó otra ruta.
Rota la
comunicación, se perdió la empatía, ¿dónde quedaste, dónde vas, dónde van? Así
el mundo está repleto de seres que son lo que no eran y lo que eran ya no son.
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